La violencia contra las mujeres puede adoptar muchas formas y, a veces se oculta tras el anonimato que inevitablemente proporciona Internet. La sextorsión es una de ellas y, para prevenirla y proteger a los colectivos más vulnerables, es importante saber qué es y cómo funciona. En nuestra campaña “En Ciber, Cibersegurola” hemos creado un vídeo de animación, que explica paso a paso un ejemplo de sextorsión.
La sextorsión es una forma de chantaje, en el que habitualmente se amenaza a la víctima con divulgar imágenes íntimas que se han obtenido de ella, si no se accede a lo que el delincuente demanda. Estas exigencias, pueden ser de muy diversos tipos (sexual, económico, etc.) y, en ocasiones, pueden darse varias formas a la vez.
Algunos tipos de sextorsión pueden ser:
- En el ámbito de la pareja: o una expareja para pretender seguir con una relación o mantener relaciones sexuales en contra de la voluntad de la víctima. En nuestra campaña, te damos 10 signos de alerta que deberían servirte para identificar la violencia de género a través de los dispositivos electrónicos.
- Como una estrategia de Child grooming: mediante acciones que lleva a cabo un depredador sexual o groomer, para condicionar la voluntad de los menores y obtener imágenes o, en el peor de los casos, un encuentro físico.
- Con fines económicos: utilizando material íntimo real o manipulado sobre la víctima o sus familiares, para amenazarla con divulgar en el medio online o redes sociales, si no obtiene un pago económico.
En todos los casos la intimidación y el miedo de la víctima son el arma del ciberdelincuente. Por ello, ten bien presente estas consideraciones:
- No es tu culpa: si alguien te acosa, te chantajea o defrauda tu confianza. En ocasiones esto sucede incluso sin que seas consciente de ello. Te recomendamos estos consejos para un uso seguro de la webcam.
- Pide ayuda: la infancia y la mujer son los colectivos más vulnerables. Generar un clima de confianza y comunicación en el hogar facilita la prevención frente a este tipo de situaciones.
- Denuncia y no difundas: Difundir imágenes íntimas de una persona sin su consentimiento constituye un delito muy grave. Piensa antes de difundir y denuncia, si te encuentras en esta situación.
El acompañamiento digital dentro del hogar es clave
Siendo el colectivo de menores uno de los más vulnerables frente a la ciberdelincuencia, lo mejor que podemos hacer es acompañarles, guiarles y educarles en su interacción con el medio digital, para que puedan desenvolverse de la manera más segura posible. Esto se conoce como parentalidad digital positiva. El medio digital, igual que el medio físico, tiene sus riesgos. Enseñarles a identificarlos y a actuar en situaciones comprometidas, les ayudará a defenderse mejor en el uso de la tecnología.
No hay que olvidar que 1 de cada 3 usuarios de Internet es un menor de edad y el 70% de los niños entre 8 y 14 años han sido expuestos a riesgos como el ciberacoso, grooming o estafas.
En los hogares donde habitualmente se acompaña y orienta activamente a los más pequeños sobre el uso responsable de la tecnología desarrollan mejores habilidades de pensamiento crítico y están un 50% menos expuestos a comportamientos de riesgo. En Cyberzaintza te proporcionamos la información que necesitas para ello. Por eso, no dejes de visitar la página “En Ciber, Cibersegurola”, para encontrar otros contenidos de seguridad en Internet y Redes Sociales enfocada a menores.